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Redacción central

Un abogado celebra hasta perder el juicio y la vida

Un abogado de aproximadamente 44 años, celebró hasta perder el juicio y murió atragantado con su pijchu de coca. El hecho sucedió en la ciudad de El Alto y cadáver fue hallado en el baño de la vivienda de su hermano menor.

“Un hombre de 44 años que habría sido invitado por su hermano menor a una vivienda. Lamentablemente murió, luego de consumir bebidas alcohólicas y masticado coca”, informó el subdirector de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de La Paz, Juan José Donaire.

El hecho se registró la noche del lunes, cuando el hermano menor convocó al abogado a su vivienda para celebrar una fiesta de cumpleaños, según la información preliminar.

Luego de una buena cena, los hermanos consumieron bebidas alcohólicas al ritmo de las morenadas y música tropical. No tardaron en comprar tragos y la fiesta se prolongó hasta el martes.

En medio de la charla y la costumbre, ambos hermanos comenzaron a mascar (pijchar) hojas de coca sin descuidarse de la sabrosa lejía.

Según el relato del hermano menor, debido a las ingentes cantidades de alcohol que habían consumido “prendió su control automático” y se fue a descansar a su habitación dejando al abogado en la sala. 

“El hermano menor, a determinadas horas se fue a su dormitorio y deja solo a la víctima en la sala de la vivienda. Al día siguiente, prácticamente se sorprende cuando encuentra al interior de su baño y ve al abogado sin vida”, ratificó el oficial.

El jurista se quedó sentado en la sala en medio de las botellas y con la bolsita de hojas de coca. Como estaba bajo el efecto de “bebidas espirituosas”, el hombre seguía consumiendo coca hasta hacer un bolo, acompañado lejía y cerveza que se mezclaba en su boca.

Se presume que el abogado estaba tan embriagado quien a eso de las 02.30 de la madrugada, se dirigió a duras penas hasta el baño de la casa. Se bajó los pantalones, se sentó en el inodoro y ahí fue todo.

Al cabo de unos prolongados minutos, el hombre se olvidó que aún tenía el bolo de coca en su boca y el sueño comenzó a dominarlo.

Luchó por mantenerse despierto, pero no lo logró ya que su cabeza se fue hacia atrás, sumergiéndose en los brazos de Morfeo (Dios de los sueños en la mitología griega).

Lamentablemente, cuando estaba en ese sueño profundo, al tratar de tomar una bocanada de aire, se introdujo en su garganta el pijchu de coca.

El bolo de coca le cerró las vías respiratorias y el hombre sufrió una broncoaspiración. No pudo ni incorporarse y ni gritar para pedir auxilio de lo borracho que estaba. Su agonía se prolongó por casi 40 minutos, sin que nadie pudiera acudir en su ayuda. Mucho menos su hermano menor que ya estaba dormido en su cama.

Al día siguiente fue el horror, ya que su propio hermano fue quien lo encontró sin vida y con los ojos en blanco a su hermano. Llamó a una ambulancia y luego a la Policía que confirmaron el deceso.

El jefe policial exhortó a la población a no exceder el consumo de bebidas alcohólicas y tener cuidado con la ingesta de coca en esas condiciones.

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